El Color del Año simboliza el poder de regenerar y transformar, invitándonos a avanzar con confianza hacia un futuro lleno de posibilidades.

El Color del Año simboliza el poder de regenerar y transformar, invitándonos a avanzar con confianza hacia un futuro lleno de posibilidades.

En su libro ¿Adónde va la ciencia? (1932), el teórico físico Max Planck afirmaba que “la ciencia no puede resolver el último misterio de la naturaleza dado que, en última instancia, nosotros mismos somos parte del misterio que estamos tratando de resolver”. Ese mismo debate existencial entre ciencia, tecnología, naturaleza y la esencia del ser sigue vigente, quizás hoy más que nunca. Bambú 237-05, el Color del Año 2025, apunta a una nueva relación entre la creatividad humana, lo natural y lo sustentable, a través de la integración con las tecnologías que potencian nuestra capacidad de expresión, invención y adaptación.

Bambú 237-05 nos habla de una naturaleza distinta, de posibilidades infinitas, modificada completamente por la tecnología (y viceversa). Un verde que irradia un resplandor eléctrico e inunda los sentidos con energía y vitalidad, al mismo tiempo que asume la responsabilidad crítica de cuidar el medio ambiente, de resanar y reinventar nuestra relación con el entorno y la tecnología, e incluso redefinir nuestro propio lugar en el mundo. Este tono vibrante encarna la fuerza regenerativa de la naturaleza aunada a lo digital, apostando por una visión de futuro más sustentable y esperanzadora.

El matiz luminoso de Bambú 237-05 nos transporta a un mundo donde la tecnología se entrelaza con nuestras vidas cotidianas, recordándonos la importancia de su uso consciente. Bambú 237-05 simboliza el poder de regenerar y transformar, invitándonos a avanzar con confianza hacia un futuro lleno de posibilidades. Este color refleja la esperanza, el ingenio y la innovación detrás del fenómeno de la autoconstrucción y el desarrollo orgánico de la cultura material en México, con su carácter abierto, horizontal y resiliente.

Bambú 237-05 es un verde cítrico con alta cromaticidad y un subtono amarillo, que representa la energía vibrante de la vegetación joven, así como la innovación de la Inteligencia Artificial. Este color, estructural y energético, simboliza la dualidad de la creatividad física, artificial y natural, con la que estamos aprendiendo a convivir. Bambú 237-05 es un reflejo de la naturaleza en su estado más puro y también un emblema del futuro.

En la arquitectura, el bambú es un material que fusiona pasado y futuro en el presente: flexible, accesible, resistente y orgánico. Una solución arquitectónica que transforma la realidad, un soporte vivo para la construcción de nuestra imaginación colectiva. Partiendo de esa misma versatilidad, Bambú 237-05 puede ser empleado en espacios multifuncionales y una infinidad de combinaciones materiales, evocando un sentido de constante evolución y adaptación. Bambú 237-05 celebra una visión de un futuro más exuberante e interconectado, el inicio de un sueño compartido.

“El color del año es la narración del momento que vivimos y, además, una invitación a la acción y el cambio”.
— Elsa Ojeda

“La energía fluye vibrante, conectando el mundo natural con la inteligencia artificial, para crear un color fuerte y lleno de dinamismo”.
— Jacobo Ángeles